Un parque con ritmo
El parque de Yoyogi, es uno de los mas populares de Tokio, especialmente porque en su interior se halla uno de los santuarios mas emblemáticos de la ciudad, el Meji-Jingu.
El parque es uno de los mas espectaculares que se pueden encontrar en la ciudad y son muchos los kilómetros de arboles y vegetación , así como diferentes especies de aves que acoge.
Dentro del parque cuya entrada es gratuita, encontramos diferentes jardines y lagos , así como casas de te.También hay un jardín botánico.
Fuente para purificarse
El parque es un lugar ideal para escaparse del ajetreo de Tokio y relajarse contemplando las especies autóctonas de flores y arboles.
Los domingos es un punto muy concurrido ya que, muchos grupos de músicos especialmente roqueros se juntan en el parque bailando al son de su música y deleitando los oídos de los mas curiosos.
Esta particular costumbre dominical se ha hecho muy popular entre los turistas y cada vez son mas los que acuden a ver este curioso «desfile» rockero.
Visitar Yoyogi y su santuario del Meji-Jingu, no puede robaros mas de un par de horas así que no perdáis la oportunidad de pasear por un entorno alucinante en mitad de una ciudad estresante.
Como Llegar
Para llegar al parque no tendremos problemas ya que tanto el tren como el metro tienen parada allí, aunque quizás lo mejor es bajarse en Harajuku y así poder ver el barrio y el parque ese mismo día.
Plano del parque
si que es bonito si, parece mentira que enmedio de tokyo existan estos parques enormes, la lastima es que dentro está prohibido comer T_T y nosotros que ibamos con todo el picnic jaja
Hol aBleid, bueno es como los parques de las grandes ciudades, con sus músicos y su ambiente. Siempre es un respiro contar con un lugar a sí para evadirse en cualquier momento.
Un abrazo
Jejejje, la verdad es que a nosotros tambien nos sorprendio aunque tambien te digo que si aqui lo prohibiesen en segun que lugares todo estaria mas limpio,
un abrazo chicos
Sin duda asi es Abi, merece la pena desconectar de la tecnologia desde las esencias
un fuerte abrazo