Mojácar , con aires de levante
España , es uno de los países que puede presumir de poseer en los tiempos que corren , una extraordinaria salud en lo que a turismo se refiere.
Con el excelente clima que goza la Península Ibérica , no es extraño que millones de visitantes provenientes de todo el planeta , escojan nuestro país para disfrutar de sus vacaciones.
A partir del mes de Mayo las costas de toda la geografía estatal se abarrotan de viajeros y locales que se apresuran a disfrutar del excelente litoral español.
Además de ser una nación que cuenta con verdaderos paraísos naturales y costeros como las recientemente galardonadas Islas Cíes , podemos sentirnos orgullosos de poseer la que para muchos es la mejor y mas exquisita gastronomía del mundo , a precios irrisorios para la mayoría de visitantes del viejo continente.
La cultura y las tradiciones están presentes en las ciudades y pueblos , algunos de estos , enclaves fantásticos y llenos de encanto que enamoran a primera vista a todo aquel que se precie a descubrirlos.
Una de estas fantásticas poblaciones la encontramos en Mojácar , una localidad situada en la provincia de Almería , ubicada en el que se conoce como Levante almeriense.
La belleza de Mojácar es tan grande , que desde el año 2013 , está incluido entre los mas hermosos pueblos de toda España.
Su aspecto y fisonomía tan peculiar y bella sobre la Sierra Cabrera , si la observamos desde algún punto cercano y sus casas de color blanco puro , consiguen hipnotizar a cualquiera de tal manera que se dice que quien visita Mojácar , repite.
Como tantos y tantos pueblos de todo el país , Mojácar , multiplica sus habitantes los fines de semana y en especial en los períodos vacacionales cuando resulta complicado encontrar alojamiento.
Para conseguir «esquivar» las aglomeraciones y no perder la posibilidad de disfrutar de unas fantásticas jornadas en Mojácar , existe una alternativa que crece cada día mas y que nos permite sustituir las tradicionales habitaciones de hotel por algo mas familiar.
Alojarnos en apartamentos turísticos o casas vacacionales es cada vez mas habitual por viajeros de todo el mundo ya que nos da la posibilidad de adentrarnos mucho mas en la vida local y de disfrutar del confort y privacidad de una vivienda.
Empresas como HundredRooms , nos permiten la posibilidad de escoger y comparar precios de este tipo de alojamientos para poder gozar de localidades como Mojácar a tope.
Una vez solventado el tema del alojamiento , debemos saber que esta fantástica población almeriense dispone de algunos lugares que no debemos pasar por alto.
Que ver
- Pasear por sus laberínticas calles llenas de historia
- Barrio Judío (arrabal)
- Plaza de las Flores
- Árbol centenario y plaza del ayuntamiento
- Estatua de la Mojaquera
- Iglesia parroquial de Santa María
- Sendero La Mena
- Fuente Mora
- Torre de Macenas
- Torre del Pirulico
- Playas de Mojácar
Entre otros muchos lugares
Por todos estos motivos y muchos mas , una estancia en Mojácar se convierte en una experiencia inolvidable.
Vivo en Argentina, y distribuyo mi tiempo entre una villa de montaña con un hermoso lago a mis pies ( lago Aluminé) y una ciudad de provincia (Neuquén). Mis abuelos vivían en Mojácar, ella era nacida en ese hermoso lugar y mi abuelo de Bédar. Se vinieron al sur de Argentina cuando allá las condiciones económicas no eran buenas, y mi abuelo tenía que irse a Marruecos y a Francia para conseguir trabajo. Muy jóvenes partieron, cuando ya tenían una niñita de cuatro años , primero vino el abuelo con su cuñado y luego mi abuela con su pequeña, sola con veintinueve años y mucha incertidumbre según me imagino, ya viajó en un barco de dimensiones muy grandes(ella contaba que se aimpresionó al verlo) en calidad de emigrante. Tampoco en este país tuvo una vida regalada, trabajaron mucho y tuvieron varios hijos argentinos. El abuelo falleció a los sesenta años trabajando en labores de fruticultor, en una quinta que no era suya. La abuela siguió al frente de esa tierra luchando para sobrevivir junto a sus hijos. Sus nombres eran Alfonso Alcaraz y Francisca Artero. Algún día pronto, porque ya soy grande y el tiempo no juega a mi favor, voy a ir a recorrer esos hermosos lugares, en nombre y en recuerdo de ellos, que no pudieron hacerlo.