Un alto en el camino
La que dicen es la capital romántica del Sudeste Asiático, Luang Prabang , es un auténtico vergel de templos y religión en cada una de sus esquinas.
El color naranja y azafrán de los centenares de monjes que recorren las calles de la ciudad, tiñe de misticismo una localidad que respira budismo.
Los puntos de interés de esta fantástica población son elevados, siendo la colina Phu Si , el principal reclamo , sin olvidarnos de un buen número de templos indispensables.
En el Wat Paphaimisaiyaram además de disfrutar de un templo precioso con una ornamentación mas que elaborada , podemos contemplar e intercambiar impresiones con los monjes que lo habitan.
De todas las edades aunque la mayoría bastante jóvenes , estos religiosos nos mostrarán gustosamente el recinto y estarán encantados de conversar con vosotros.
El wat no es muy grande y destaca su fachada y las columnas decoradas que le dan un toque de distinción al mas puro estilo arquitectónico local.
Las ventanas también ornamentadas especialmente en su interior merecen mucho la pena así como los grabados y pinturas de su interior.
Situado en pleno centro de la ciudad y a pocos metros de la colina Phu Si, este pequeño santuario es digno de ver y un punto perfecto para aprender mas sobre el budismo en Laos.
El Wat Paphaimisayaram es un enclave ideal para adentrarnos en la ciudad y poder observar de cerca la vida de muchos monjes que escogen la religión para escapar de las calles.
Que bueno que los propios monjes te enseñen el templo. Estas experiencias son las que valen la pena en los viajes!!
Saludos
Hola Diego, ¿en que idioma os entendiais? supongo que en inglés o quizá castellano.
Es curioso que los monjes te enseñen el templo. Por aquí también antes lo hacían. Ahora son los guías quien enseñan los lugares.
Un abrazo
Sin lugar a dudas Fran
Son esas experiencias que luego nunca olvidas
un abrazo
En Ingles Abi
la verdad es que estos monjes eran jovenes y con ganas de hablar y aprender cosas de los turistas.
Un honor aprender de ellos y ver como con poco tambien se puede ser feliz
un abrazo